En la actualidad, existe una gran preocupación sobre cómo poder adelgazar o cómo acelerar este proceso en poco tiempo. Hay que tener en cuenta que la naturaleza es sabia y, en este caso, no por más azúcar más dulce.
Que una persona pueda adelgazar más o menos rápido o con mayor o menor facilidad depende de su gasto energético total (GET). Existen varios factores que influyen en este gasto:
- Gasto Energético Basal (GEB): es el gasto que se produce cuando estamos en reposo físico y mental absoluto. Este componente supone aproximadamente del 60% al 70% del gasto total.
- Gasto debido a la Actividad Física (GAF): depende de la actividad física diaria que tengamos y de las actividades de la vida cotidiana. Puede representar desde el 10% hasta el 30% o más del gasto total.
- Efecto Termogénico de los Alimentos (ETA): es el gasto que se atribuye al consumo de alimentos y se estima entorno al 10% del total.
Es decir, el gasto energético total de una persona estará determinado por el gasto imprescindible, mínimo e inherente al mantenerse con vida; por el gasto derivado de la realización de cualquier actividad física que no implique reposo absoluto y, por el gasto asociado al consumo de alimentos. Tanto el gasto energético basal como la actividad física dependen mucho del individuo. Hoy nos centraremos especialmente en el tercer factor que es universal para todos.
¿QUÉ ES EL EFECTO TERMOGÉNICO DE LOS ALIMENTOS (ETA)?
ETA es cualquier gasto por encima del metabolismo basal debido al procesamiento de los alimentos para su uso y almacenamiento.
Los alimentos termogénicos son capaces de aumentar el metabolismo y la temperatura corporal. Se llaman así, pues al generar calor mediante el aumento del metabolismo, provocan la desintegración de la grasa por termogénesis. Además, si se agrega una dieta balanceada con comidas saludables, más una rutina de ejercicios, los resultados pueden ser aún más positivos.
La termogénesis es la capacidad que tiene nuestro organismo de generar calor, por medio de reacciones metabólicas, por ejemplo al hacer ejercicio físico. Los productos termogénicos tienen la capacidad de activar receptores específicos en las células, que las hacen creer que el cerebro les pide que eleven la producción de calor, por medio del consumo de ácidos grasos de las reservas corporales. Con esto, se comienza a realizar un incremento del calor, usando estas grasas que comienzan a reducirse.
ALIMENTOS TERMOGÉNICOS
Existen alimentos que favorecen más a la termogénesis y eso son llamados termogénicos. Algunos de ellos son:
- Agua. Se recomienda tomar entre 6 y 8 vasos de agua diario
- Jengibre. Además de poseer propiedades para agilizar el metabolismo a través del aumento de la temperatura corporal, acelera el proceso de la digestión y ayuda a combatir el apetito constante.
- Omega 3. Estos ácidos grasos pueden encontrarse en pescados azules como el atún o salmón, y en vegetales como las nueces y almendras.
- Chile o ají. Los niveles de capsaicina dentro de los chiles más picantes ayudan a aumentar la temperatura corporal.
- Canela. Puede usarse en ensaladas, té y de otras formas, además tiene antioxidantes y puede ayudar a disminuir el consumo de azúcar, utilizándolo como endulzante sustituto.
- Café. La cafeína provoca que los músculos necesiten mayores niveles de energía para su correcto funcionamiento ya que aumenta la temperatura corporal de manera notable. De igual forma, la cafeína se conforma por un compuesto llamada paraxatina cuyos efectos permiten utilizar más grasas como fuente de energía en lugar de glucosa.
- Pimienta roja. El picante aumenta la termogénesis por un aumento de calor en el cuerpo.
- Te verde y blanco. Las catequinas son antioxidantes dentro del té verde y blanco, que entre sus funciones más destacadas está la de aumentar el calor del cuerpo y por ende el metabolismo para la regularización.
- Yerba mate. Además de ser termogénica, actúa como antioxidante y diurético.
- Naranja amarga. Por sus compuestos, logra que se incremente el proceso de la termogénesis.
Existen diversos alimentos o especias que contribuyen al aumento del gasto metabólico. No existen estudios científicos que concluyan que sea al 100% efectivo, exceptuando la presencia de picante en los alimentos. Tal como la pimienta, chile, mostaza, tabasco, etc. pueden llegar a incrementar el ETA hasta un 33% frente a la misma comida sin esos ingredientes 1,2. Aunque sobre esta cuestión, puede haber una importante variabilidad personal, ya no solo lo que respecta a la tolerancia del propio alimento picante, sino también al propio efecto de este en el gasto metabólico.
CINTIA SEGURA
Dietista-Nutricionista, Colaboradora de NutriPharm
REFERENCIAS: